Entrevista con Javiera Méndez, 2do Dan.

“Es fácil recurrir a la violencia y hacer daño, pero es difícil lograr una sensibilidad que permita encontrar el desequilibrio y controlar la situación”

Es sabido en el mundo de las artes marciales que la participación de la mujer es escasa, y el Aikido no es la excepción. El pasado 27 de julio la Federación Chilena de Aikido llevó a cabo el proceso semestral de examinaciones de grados Dan, oportunidad ante la cual Javiera Méndez, practicante del club de Aikido Takemusu de Coquimbo, se presentó para rendir el examen de 2do Dan.

Conversamos con Javiera luego que recibiera la aprobación de su grado, con el objetivo de conocer su camino en el Aikido, sus motivaciones y más detalles sobre su próximo viaje a Japón junto a una delegación de directivos de la Federación Chilena de Aikido.

Javiera entrena Aikido desde los 15 años. Comenzó practicando en La Serena, primero con Sensei Eduardo Guerra en Taiyo No Kokoro y luego con Sensei Oscar Ubilla, en el Club de Aikido Takemusu, siendo los dos únicos dojos en los que se ha forjado como aikidoka.

¿Cómo fueron tus inicios practicando? ¿Cómo llegaste al Aikido?

Supongo que llegué por la típica búsqueda de la mujer que quiere defenderse, que quiere demostrar que igual es fuerte, o que es igual de fuerte que los hombres. Pero eso fue cambiando con el tiempo, ese objetivo se modificó y después se volvió algo más divertido.

La práctica se volvió algo más natural y fui descubriendo otras cosas, como trabajar con la calma, encontrar el desequilibrio, no usar fuerza, etc. Es fácil recurrir a la violencia y hacer daño, pero es difícil lograr una sensibilidad que permita encontrar el desequilibrio en el otro y controlar la situación, eso es lo divertido, eso es lo que me gusta del Aikido.

¿Qué te motiva a seguir entrenando?

¿Qué me motiva? Es que ya estoy en esto… No me veo sin Aikido, es raro imaginarme sin Aikido, es parte de uno, es como respirar…

¿En serio? ¿Y te ves haciendo Aikido hasta cuándo?

¡Siempre! (risas).

¿Cómo fue la preparación para tu examen de 2do Dan?

Estresante (más risas). Igual es complicado enfrentar este tipo de evaluaciones donde uno está tan expuesto, pero es importante, porque así uno mide los avances y si tienes falencias es mejor detectarlas a través de un equipo que te evalúa y así mejorar.

¿Hace cuánto que pensante en dar el 2do Dan?

Desde el año pasado que estaba en mente y de apoco me fui preparando, pero fue más este último tiempo que con la ayuda de Sensei Óscar en el dojo, con los Senseis de la federación en los seminarios y con Sensei Ricardo Toro que también me apoyó bastante.

¿Cómo te sentiste durante la examinación?

Aparte de la ansiedad… Durante el examen igual uno logra cierta paz. Sí… igual es súper difícil pero al final uno termina concentrándose en lo que está haciendo. Te olvidas del entorno, te olvidas de las personas que te están evaluando y uno trata de hacer lo que hace siempre, porque de otra forma no se podría.

¿Con qué sensación terminaste el examen? Antes que te dieran el resultado.

Quedé más tranquila, pero igual detecté mis fallas, tengo claro cuáles son algunos limitantes que tengo y en eso me voy a tener que enfocar ahora. Me sirvió para poner más atención en mis falencias.

Próximamente viajas a Japón como seleccionada a un entrenamiento intensivo auspiciado por la federación a través de recursos otorgados por IND, junto a un grupo de integrantes de la Federación Chilena de Aikido, cuéntanos cómo recibiste esta invitación.

Me llamó por teléfono el Presidente de la federación para contarme que como seleccionada de la federación me querían enviar a Japón y si tenía la disponibilidad para viajar en el periodo de septiembre de este año. Obviamente es una buena oportunidad que es difícil de negar.

¿Y qué significa para ti viajar a entrenar a Japón?

Supongo que es lo que cualquier aikidoka espera hacer en algún momento, viajar a la Meca del Aikido, a Hombu Dojo, y practicar con grandes Senseis. Aparte conocer la cultura, creo que también muchos aikidokas, a parte de la práctica del aikido lo que los motiva también es la cultura oriental y a mi también me atrae.

Finalmente, tienes alguna expectativa de lo que puede ocurrir entrenando en Hombu Dojo, qué te imaginas.

No sé (risas), todavía todo es incierto para mí, voy a vivir el momento solamente, y voy a esforzarme por practicar y dar todo en la práctica en Hombu Dojo.